Hoy en día no es extraño ver familias enteras en aeropuertos, esperando vuelos, conexiones, o llegando a destino. Cada vez es más común viajar con niños y eso se ve cuando una anda por el mundo, de lado a lado.
Recientemente llegamos de un viaje de 20 días con nuestros hijos y si bien fue una experiencia inolvidable, no exagero si digo que volvimos a Uruguay a descansar.
Viajar con niños es desafiante ¡y más si se hace “mochileando”!, conociendo, recorriendo, y con las mismas ganas de aprender -y absorber- que cuando se viajaba con pareja o amigos; ¡pero bien vale la pena!
Así que si estás por tomarte un avión con la familia -ahora que se vienen las vacaciones de julio, capaz- acá te tiro unos tips que seguro te pueden aliviar (¡me hubiese gustado a mí recibir este post antes de viajar! Da igual que sea tu primer viaje o el quinto, viajar con niños siempre es un reto y está bueno repasar algunos puntos).
1. Tomátelo con calma. Quizás estabas acostumbrada a ir con el tiempo justo al aeropuerto, ya sabías todos los trucos y atajos, pero esa época ya pasó. Ahora lo mejor es ir con tiempo de sobra. Si llegás muy pronto, dejá que tus niños jueguen -la mayoría de los grandes aeropuertos tienen zona de juegos para niños-, lo mejor es que lleguen cansados al vuelo para que se duerman lo antes posible durante el viaje.
2. No cargues demasiado el equipaje. Seguramente donde viajes podrás comprar de todo –pañales, bronceador, cremas y lo que sea necesario-. Recordá hacer un bolso de mano que tenga toallitas húmedas, pañales, mudas, comida para picar, y algunos caramelos para que los niños chupen durante el despegue y el aterrizaje, y así evitar que les duelan los oídos.
3. ¿Hotel o casa de vacaciones? Esto va de acuerdo a gustos. Los hoteles tienen sus ventajas (servicio de limpieza, algunos cuentan con niñeras, comida incluida, etc.). Sin embargo, alquilar una casa o apartamento puede servir para vivir “de local”. A mí me gusta eso de sentir que sos una más en la ciudad y no “la turista”. En tu casa podés cocinar -y eso es práctico cuando tu hijo lleva algún tipo de dieta concreta-, y hacer vida de hogar si un día decidís parar un poco la moto. Pero es una decisión personal.
4. Reserves hotel o casa hay que hacerlo “con cabeza”. Capaz ya estuviste allí hospedado y te encantó, pero es momento de pensar que vas a estar con niños. Si para subir o bajar hay muchos escalones, si la vista es espectacular pero está arriba en la montaña y no es práctico para nada, lo que antes era el paraíso, ahora puede convertirse en una pesadilla si tenés que subir y bajar miles de escalones con un carrito. Tenelo en cuenta.
5. Cuando se viaja con niños nunca hay que perderlos de vista, y si es necesario escribirle tu nombre y el número de teléfono en el brazo. Así, cuando lo encuentren, se podrán poner en contacto contigo fácilmente. Nosotros tuvimos una mala experiencia. Al llegar a un hotel en Francia mi hijo mayor estaba desesperado por ir al baño. Lo llevé rápidamente mientras mi marido hacía el check in. Cuando nos vimos nuevamente nos sorprendimos al ver que la más chiquita se había bajado del carrito en ese momento de confusión, y no estaba por ningún lado. Tras varios minutos de búsqueda desesperada (que para mí fueron eternos), la escuchamos llorar en el cuarto piso, ¡sí, cuarto piso! Había subido las escaleras mientras yo llevaba a su hermano al baño y su padre hablaba en el mostrador ¡y después no sabía por dónde bajar!
6. ¿Llevo la sillita del auto o no? Depende. Primero sugeriría que averigües cuánto sale alquilar una sillita en el destino y si no te parece una locura te aconsejo que la alquiles allá. Probablemente lleguen a destino cansados, con niños, valijas, y a tomar decisiones rápidas. Agregar al paquete una sillita de auto que son poco prácticas y ocupan espacio, no es lo más conveniente.
7. Hora de viajar ¡hacé el check in por Internet! Intentá minimizar el tiempo en el aeropuerto haciendo colas. No en todos los aeropuertos te dejan pasar antes por viajar con niños. Si hacés el check in online luego solo tendrás que dejar tu equipaje y pasar el control de seguridad.
8. Planificá, pero no te pases. Está bueno prever lo que hay para hacer y llevar opciones de entretenimiento para que tu hijo se divierta durante el viaje, pero lo cierto es que hay que considerar también cómo nos sentimos en el momento, si realmente hay ganas de hacer lo que estaba en los planes. Si la planificación es rígida, seguramente estaremos cumpliendo con lo estipulado y no estaremos conectando con lo que queremos hacer realmente en ese instante.
9. Por último ¡disfrutá! Viajar con niños es cansador pero para mí es una de las experiencias más ricas que hay y se puede compartir en familia.
Por Federica Cash