El otro día fui a buscar a mi hijo al colegio y me encontré con una imagen que me conmovió. Una camioneta llena de niños sentados uno arriba del otro como sardinas enlatadas. Dicha imagen, difícil de ver hoy por hoy, -aclaro que no vivo en Montevideo, vivo en un lugar muy tranquilo- me trajo recuerdos imborrables de mi niñez, de las idas y vueltas del colegio en una camioneta llena de hermanos y primos en donde no entraba una alfiler más. Dejo en claro que con este relato, no estoy haciendo apología de cómo nos manejábamos antes en relación a la seguridad en los autos, simplemente me emocionó al llevarme a mi pasado.
Hoy cada niño tiene su silla, su cinturón, su seguridad máxima. Y el progreso justamente tiene que ver con la toma de consciencia que hemos ido adquiriendo con el avance de la humanidad. Como padres, estamos constantemente bombardeados de información que proviene de incesantes investigaciones, que nos obligan a estar todo el tiempo evaluando, midiendo, cuestionándonos si esto estará bien, mal, si «x» situación vivida le repercutirá a nuestro hijo el día de mañana. Hoy sabemos demasiado; que la fruta, que la verdurita, que la carne roja con prudencia, que la leche -que ahora ya no es tan buena-, entre tanta otra data; y así vamos, leyendo, absorbiendo, sintiéndonos incómodos si nos salimos de lo “comprobado”. Sinceramente, algunas veces extraño un poco el desconocimiento, la vida relajada, el auto repleto hasta la manija, la comida «chatarra», la falta de información, la desprofesionalización de las cosas, la comodidad de saber que “¡no pasa nada!”, etc., etc., etc.
En otra oportunidad, nuevamente a la salida del colegio, el bien pensado de mi hijo me dijo: “¡Mami nos olvidamos del Día del Niño!”, enfrente a su maestra. ¡Qué insensible!, habrá pensado ella, que tras el ansiado día había organizado una ronda en la que cada niño contaba sobre los regalos que había recibido.
Lo cierto es que la importancia que están adquiriendo estas fechas -comerciales en un 100% a mi entender- me dejan en offside. Todos sus compañeros habían recibido regalos, salidas a comer, festejos especiales. Y mi niño con gran sinceridad respondió que él no había recibido nada. Lloró. Y mi corazón se arrugó.
Provengo de una familia y una época en donde estas fechas pasaban desapercibidas, no existían directamente en mi entorno. Inconscientemente, ni se habló del gran día en casa. A pesar del mal momento, sostengo que no es necesario que el niño reciba regalos porque sí. Cuantos menos regalos reciba en la vida, más agradecido va a estar. ¿O acaso no han sido testigos mil veces del aburrimiento que tiene un niño cuando abre el regalo número 10?
Estas anécdotas que les cuento reflejan cómo han cambiado las cosas a través de los años. Y está bien que así sea. Bienvenida toda la información del mundo para criar lo mejor posible a nuestros hijos, dueños del futuro. Bienvenida toda la seguridad posible para evitar lo peor. Bienvenidos sean los días especiales para celebrar la vida y reunir a la familia. Pero con este nuevo escenario creo que debemos cuidarnos de no caer en obsesiones, en cuidados extremos, en regalos sin sentido, porque entonces seguramente habremos criado niños frágiles, inmaduros, caprichosos y con cierta apatía al asombro del día a día.
Después del momento raro en que Juanfe me “recordó” el Día del Niño, fuimos a un kiosco a comprar un súper huevo Kinder ¡lleno de sorpresas! Y ahí fui yo quien le recordé lo afortunado que era, al recibir a diario el mejor regalo de todos, que no es más que el amor de sus papás, de su hermana y del entorno natural en que se está criando…
Por Federica Cash
100% de acuerdo!! Grande Federica!
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Fede estoy totalmente de acuerdo contigo,cuando Maca era chica 6 o 7 iba al Santa Rita,tipica pregunta del lunes siguiente ¨que te regalaron»,nosotros como en tu casa jamas le dimos bola a ese dia pèro sabiendo en donde estaba decidi hacerle una ¨manualidad¨,en un corazon le escribi una carta.
CReo que la guarda hasta el dia de hoy y fue su regalo mas importante durante mucho tiempo.
Fue un ejemplo en el colegio cuando se paro y con orgullo mostro su regalo.imaginate al lado de bicicletas y demas…..
Gracias por recordarlo de esa manera
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Una linda excusa para reunir a la familia incluidos abuelos, bisabuelos si sabemos que ellos son lo más importante en su vida, que se disfruten y que tanto abuelos y bisabuelos puedan mimarlos. Sabemos cuánto les gustan los cumpleaños a nuestros hijos,que cuesta reunirse un día más con un motivo diferente. No hablo de regalos !! En eso si estoy de acuerdo. Juntemos s la familia !! Cualquier excusa es válida para reunirse🎂🎂🎉🎉 la vida es corta y la gente que está más cerca del final es la que nos lo recuerda 😊😊😊🎈🎈
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Hola Paula! Gracias por escribir. Estoy de acuerdo en festejar estas fechas especiales para celebrar la vida -como está escrito en la nota- y por supuesto que son una gran excusa para reunir a la familia. En mi casa de origen no se suelen festejar estas fechas y una viene con ese «chip» pero el año que viene lo voy a implementar y mi hijo va a poder contar cómo celebró el Día del Niño. (Y no quedaré tan el offside jajaja)
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Hola Amiga. En casa tampoco hubieron regalos ni se hizo nada x el dia del niño. Si en el cole les preguntaron se ve que sortearon el momento sin problema porque no recibi quejas al respecto jeje. Lo hablamos el tema con ellos y les dijimos que ya teniam muchos regalos y juguetes que ni siquiera los sabian cuidar como correspondia (tema hablado a diario) y que su regalo iba a ser estar el dia en casa con mama y papa y jugar juntos! Cero quejas x suerte!
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Una vez mas Federica nos transportaste a la niñez…..Me emociona mucho!!!!
Q lindo el comentario de «TUTI» …..
Besos !!
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Tarde pero llego..jaja
Federica de ninguna manera tenés que cambiar esto de no regalar! Es tu manera de ser mamá y el llanto de tu hijo no tuvo que ver con eso sino con no poder expresarlo (porque es un niño y su manera de expresar en mostrar,dar, hacerlo palpable). Tal vez no pudo Expresar que ese día pasó con sus papás y su hermana…o con quien sea…y que ese sea su día del niño. Podes cocinar algo con ellos…o lo que sea..y eso ser su día. En definitiva para mi..el día del niño es entender que ESE DÍA las mamás les recordamos a nuestros hijos lo importante que son para nosotros. Y que ese domingo todo lo que se hace es en honor a ellos (auqnei sea así todos los días, pero el niño entiende que es especial ese dimknfl de agosto).
Cocinar…hacer algo diferente que todos los domingos…es lo que verdaderamente educa a los hijos. Ser mamá…como queremos y podemos serlo.
Un abrazo a todas las mamás
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