Ahora sí, empieza el año de verdad y con él la escuela, el jardín y las actividades extracurriculares que cada vez son más variadas y complementan de forma maravillosa el mundo de la niñez.
Sobre gustos, habilidades, y destrezas no hay nada escrito, así que si a tu niño/a no le gusta el deporte, hoy ya no es un problema. Existen varias disciplinas que pueden alimentar el espíritu de los niños y brindarles felicidad en el día a día.
El arte es una opción, pues regala la posibilidad de crear, sentir y entusiasmar como pocas cosas. Si se encuentran en la etapa de buscar lindas actividades para sus hijos o tienen algún niño con una veta artística definida, les contamos sobre un taller de arte para niños, «Barcos de papel», a cargo de la artista plástica Ethel Ita Horowitz. Para conocer su propuesta y los beneficios del arte, hablamos con ella en esta entrevista.
¿Qué importancia tiene el arte en la vida de los niños?
El arte es el mejor camino para que un niño pueda expresar su creatividad y desarrollarse de forma integral. El contacto con las formas, los colores y otras técnicas libres permite que el niño se exprese libremente desarrollando su imaginación al máximo. La expresión plástica es una actividad que florece de forma muy natural en los más pequeños; se trata entonces de potenciar esta condición ofreciéndole al niño apoyo, materiales y técnicas para sacar el mejor provecho de ello.
¿Qué beneficios trae hacerlo?
Los niños logran expresar todo su mundo interior, emociones y sensaciones, canalizando así muchos miedos o barreras que puedan sentir a la hora de relacionarse con el mundo que los rodea. El arte potencia sus capacidades intelectuales y fortalece el vínculo afectivo entre padres e hijos, logrando en algunos casos una comunicación más fluida. Muchas veces puede ayudar también a trabajar el autoestima; se pueden realizar muchos ejercicios donde el niño disfrute de todo lo que puede lograr trabajando y expresándose libremente.
A través de tus talleres, ¿qué has podido ver de la relación entre el arte y los niños?
Aquellos que en principio se «frustran» van dejando esto atrás, ganan rápidamente más seguridad en sí mismos y mucha confianza. Los niños que crean son más felices. Percibí también cómo evolucionan en su lenguaje personal y logran ganar seguridad en el desarrollo de diversas técnicas y en la elección de la temática artística.
¿Qué buscas priorizar?
El disfrute, la seguridad, el juego y por supuesto el aprendizaje de forma personal, cada uno tiene sus tiempos. Se respeta mucho el ritmo de creación y trabajo de cada niño.
¿Con qué materiales trabajan?
Utilizamos lápices, crayolas, pasteles, acrílico, barro, cerámica y material de reciclaje: cajas de cartón, tubos de papel higiénico, bandejas, chapitas. A todo aquello que generalmente va a la basura, le buscamos una nueva forma, para transformar así estos materiales en una pequeña «obra de arte».
¿Cómo se desarrolla una clase?
El taller es personalizado y se ajusta a las diferentes edades; los más chicos comienzan con una propuesta inicial de tipo experimental en la cual se realiza un proceso de sensibilización, expresión libre y reconocimiento primario de algunas técnicas sencillas. Los más grandes comienzan un proceso de reconocimiento de técnicas plásticas que van desde lo más «fácil» a lo más «difícil» respetando en cada caso los tiempos, la evolución y los intereses de cada participante.
Los talleres son flexibles y personalizados. No son talleres «estrictos» con una estructura fija, sino que se ajustan a los gustos de cada niño y se personalizan según los intereses individuales. Digamos que se trata de crear con libertad, pero aceptando y comprendiendo también los procesos y el orden propio de la expresión plástica.
¿Para qué edades son?
El taller es para niños de entre 6 y 12 años, en algunos casos se aceptan más pequeños pero siempre y cuando tengan una vocación o interés bien marcado.
Más info: En Facebook «Barcos de papel». Cel 098306745 o mail ethel14@hotmail.com
Por Federica Cash