Mi amiga del parque
Hace tiempo vengo pensando que cuando llega la maternidad y empezás a frecuentar la placita de juegos de tu barrio, ese lugar se transforma en tu nuevo boliche -haciendo a un lado “el levante”, claro-. Con un bebe en casa, tus salidas son más diurnas que nocturnas y la plaza es el nuevo centro de reunión y sociales. Ahí quedás para verte con amigas con hijos, con alguna “amiga tía” dispuesta a alivianarte la tarea por un rato y te encontrás también con varias desconocidas con quienes, al tiempo de verse en el subibaja o tobogán, terminan en miradas cómplices que pasan luego a ser tardes de largas conversaciones. Sabés que con esa mujer que también lleva carrito y usa saco largo (porque sus caderas tuvieron la misma mala suerte que las tuyas) tenés mucho en común. Aunque casi ni la conozcas. De esa amistad que surge entre mamás cuando están con la guardia baja y de la solidaridad femenina que se refuerza en cada encuentro de plaza, trata la película “Mi amiga del parque”, …